![]() |
AgreEl experto percusionistas indica a sus alumnos los golpes que se deben dar en la conga en determinado ritmo.gar leyenda |
La vida del Viruta original, el mexicano, nada tiene que ver con la
de nuestro José René Martínez Vargas, el Viruta de Sarría, quien nació
un 27 de abril de 1958.
El cómico, por lo que hemos leído, vivió y murió amargado, pero el
caraqueño ha disfrutado su vida en el mejor mundo posible: el de la
música con sabor a cuero. José René, o Viruta a secas, se ganó el mote
por el junte con “un pana llamado “El Gordo” William, quién sigue siendo
mi pana e igualmente gordo… El chalequeo continúa”.
EL GOLPE TUYERO
De esa maravillosa fuente provino todo. En la casa de Viruta se cocinaba
el golpe tuyero. “En mi casa se celebraba el Velorio de la Cruz de
Mayo. Mi papá tocaba un poquito la guitarra y mis abuelos bailaban al
son del golpe tuyero. Creo que de allí comenzó a florecer esa cosa
musical”. Como la mayoría de los tumbadores, Viruta no es amigo de la
cháchara persistente. Lo suyo son los cueros.
En Sarría se le quiere y admira porque con el tiempo se ha ganado el
respeto de los vecinos. Forma, junto con Orlando Poleo, Ernestico y
otros congueros, una legión que en su momento se dispuso a rescatar con
la música a muchachos que bailaban en otra rumba.
“Esa ha sido mi gran satisfacción. Como tú dices, hago Patria a fuerza de timbales, conga y bongó”.
DE LA GUATACA A LA ENSEÑANZA
La vida de Viruta transcurre en medio de sus instrumentos. No se queja
del trabajo “porque alguien siempre me llama para matar un tigre”.
Mientras tanto, se dedica a lo suyo, a la enseñanza de la percusión.
“Yo disfruto con lo que hago. Eso es lo mío. Me lleno de satisfacción
cuando veo la sonrisa de un alumno al saber que lo está haciendo bien”,
expresó.
Viruta nació en Guaicaipuro y se crió en el callejón Lourdes de
Sarría. “Allí vivían los Liendo, quienes sacaban unas tumbadoras y
dejaban que nosotros descargáramos. Esos nosotros éramos Chucho,
Orlando, Ernestico… Había un pana al que bautizamos como el maestro
espiritual: Pablo García. Un saxofonista que era pareja de Antonieta
Colón “La Cobra”. El tipo sabía de unos chamitos que tocaban. Fue él
quien nos llevó a tocar con un grupo llamado Sabañón, quienes
practicaban en el taller de arte integral ubicado por donde vive la
familia de Poleo. Eso cambió nuestras vida. Fue así como Orlando Poleo,
Jesús Manzanares y yo empezamos nuestras andanzas musicales”.
“Cuando Sabañón desaparece y empezamos con un proyecto que devino en
el Autana, donde está- bamos, entre otros, Gerardo Rosales, Ernestico
Pérez, Poleo… Ese grupo se fue expandiendo y fue así como germinó esa
semilla de percusionistas de Sarría. Allí comenzó la cosa”, dijo.
Más adelante añadió: “Académicamente aprendí por iniciativa propia.
Compré libros, fui interesándome por los patrones rítmicos hasta
adquirir ciertos conocimientos que son válidos para la enseñanza.
Estudié con Totoño un poco y con otros compañeros que me dieron
información para desarrollarme musicalmente hablando. Con Luis Pacheco
desarrollé los conocimientos en relación con la lectura. El fue un gran
impulso y eso se lo debo. Además, enseñando he aprendido un montón de
cosas”.
Viruta sigue en lo suyo, es más docente que ejecutante. Todos los
fines de semanas imparte clases en el Centro Cultural Sarría. Es un
músico fuera de serie y quiere que otros lo sean. ¡Sigue haciendo
Patria, Viruta, vale la pena!
ÁNGEL MÉNDEZ
Comentarios
Publicar un comentario