La Unión Nacional de
Trabajadores (Únete) informó sobre una solicitud de desocupación inmediata de
su oficina ubicada en el Instituto Nacional de Capacitación y Recreación de los
Trabajadores (Incret), para darle otro uso que beneficie a la institución
No nos cabe duda que esta es una nueva retaliación
contra la Unete y sus sindicatos de base, los cuales vienen luchando por los
derechos de sus trabajadores en numerosas empresas estatales, y jugando un rol
cada vez más crítico y autónomo frente a las medidas anti laborales de la tecnocracia gobierno, y un ministerio del trabajo
inoperante
La acción de desalojo fue ejecutada por Reinaldo
Morales, presidente del Incret, en su doble rol de representante de una
institución del gobierno, y dirigente sindical del CNE y vicepresidente de la
Central Bolivariana Socialista de Trabajadores. Esta vez, en sus funciones como
patrón, dirigió amenazas a Servando Carbone, coordinador nacional de la Unete,
quien se negó a recibir el oficio. En este accionar se pone en evidencia cómo
un dirigente sindical ejerce simultáneamente funciones de gobierno, perdiendo
toda autonomía, sometiéndose al patrón-Estado, mientras actúa en contra de una
organización sindical
Los que impulsamos la democracia, autonomía e
independencia de los sindicatos, como arma de los trabajadores en la lucha
contra los patronos públicos y privados. Por eso levantamos nuestra enérgica
voz de protesta ante las pretensiones de desalojo de la Unete por parte del gobierno,
y defendemos el derecho de las organizaciones sindicales a presentar ante la
comisión de la OIT, y hacer público ante los trabajadores del mundo, un informe
sobre la real situación de los trabajadores en el país
Comentarios
Publicar un comentario